viernes, 25 de enero de 2019

¡Divide y vencerás!

Vivo en Italia hace casi tres años. Una de las cosas que más me impresionó cuando llegué fue la belleza y pulcritud de sus envases. En Italia cada frasco de café es digno de una foto para cualquier instagramer, las galletas se compran en elaboradas cajas y los aceites y vinagres en decorativas botellas que indefectiblemente van a la basura, porque de lo contrario te volverías acumulador.


Pero botar estos envases no "duele" porque sabes que retornarán en tu próxima compra. ¿Por qué Italia se da el gusto y el lujo de vender sus productos en envases "desechables" que nosotros guardaríamos como ornamento en nuestra cocina? La respuesta es sencilla: Italia recicla.


En Italia el recojo diferenciado es OBLIGATORIO. Cada ciudadano debe tener al menos cinco cestos de basura en casa, de diferentes colores porque el recojo se divide en estas categorías: húmedo, vidrio, plástico, papel y seco o indiferenciado.

El cesto café pertenece al "húmedo". Allí se botan aquellos desechos orgánicos: cáscaras, frutas o verduras malogradas, residuos de comida, etc. Esta basura se puede depositar dos veces por semana.

En el cesto de vidrio van botellas, frascos, latas y aluminio. El color de este cesto es verde y su recojo es cada dos semanas.

En el cesto amarillo se depositan los residuos plásticos. Botellas, envases o bolsas van en esta categoría que se recoje también cada 15 días, sin coincidir jamás con el día señalado para el recojo de otra.

El cesto azul es para papel. Allí se depositan periódicos, cartones, envases, etc. Su recolección es dos veces al mes.

Y en la última clasificación están los secos que son todos aquellos desechos que no entran en ninguna de las categorías antes mencionadas. Hablamos de la basura del baño, por ejemplo, pañales, telas, cds, o cualquier envase que tenga residuos orgánicos, por ejemplo papeles, cartones o bolsas con restos de comida. Esta basura se puede botar una vez por semana.

De más está indicar que pilas y baterías agotadas se separan y se depositan en lugares específicos.


Las normas no son infringidas. Las bolsas y cestas se depositan en las puertas de las casas, según el calendario de recolección, y si alguna contiene desechos mal separados  sencillamente no es levantada y su dueño debe llevarla a casa nuevamente.

¡En Italia el reciclaje es una cultura!

En Bolivia:


La Paz está al borde de una crisis sanitaria ante el bloqueo de su relleno sanitario y las 540 toneladas de basura que se producen a diario están ahora inundando las calles. Más allá del tema político (que es evidente) las autoridades edilicias deben hacer conciencia de que es menester cambiar la filosofía del recojo.

Este post no va dirigido al ciudadano que de nada le serviría actuar de oficio y separar sus residuos si al final no hay una política seria de recojo diferenciado desde el municipio.

El recojo de basura funciona en La Paz en manos de empresas que se licitan el servicio. Es hora de que la Comuna contrate a una empresa ¡de este siglo! capaz de gestionar una logística bien pensada de  recojo diferenciado, reciclaje y manejo de orgánicos... porque la única diferencia que hay  entre esta coyuntura y otras es que nuestras montañas de basura ahora se ven, pero eso sí, siempre existieron aunque claro... lo que no se ve, no duele.

Sí, Revilla, divide (la basura) ¡y vencerás!

Foto: El Deber

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